Adeptos

jueves, 12 de diciembre de 2013

Piel hidratada en invierno.

¿Qué pasa monstruos? 

Pues estamos aquí otra semanita, y esta vez volviendo al tema de la imagen y la belleza, dejando de lado tanta ropa y tantas tallas, vengo con una entrada sobre el cuidado de la piel que espero que a más de uno le venga bien. 

Puede parecernos que en verano la piel se resiente mucho más con el sol, sin embargo, el invierno (Que aunque no lo notemos también hace sol) la piel sufre mucho. Esto se debe a la exposición de aire frío combinado con el calor de las estufas y aires acondicionados de los sitios cerrados, la piel se reseca, nos tira, se pela... Pero podemos mejorarlo. 

Para empezar y como ya he dejado caer antes, aunque estemos en invierno los rayos solares siguen llegando hasta nosotros, si no que se lo digan a todos los amantes del esquí que se queman la punta de la nariz. En estas fechas no debemos abandonar el protector solar, mirad el lado bueno, ya no tenéis que poneeroslo por todo el cuepo, con la cara será suficiente, muchas lineas de crema actualmente han incorporado en sus hidratantes protección solar, es decir, no es necesario ir con el protector solar que huele a playa en el bolso todo el año (Hay quien lo hace), con tener una buena hidratante con este plus de protección será suficiente. 

¿Y cuánto hay que hidratarse? Pues lo que sea necesario, lo que nos pida la piel. No es que tengamos que desarrollar un sexto sentido para descubrirlo, cuando la piel nos tire es que no está lo bastante hidratada. Las pieles grasas por lo general con una vez por la mañana y otra por la noche estará bien servidas. Sin embargo las que tenemos la piel seca esta carencia de hidratación la notamos mucho más y podemos ampliarlo a una aplicación más o dos. Lo ideal además sería añadir a nuestra rutina una exfoliación suave  o una media para realizarla una vez por semana, eliminando así células muertas de la piel. 

Aunque pueda sonar absurdo el agua externa no nos hidrata, y menos aun el agua caliente y menos todavía cuando va llena de cal. Después de lavarnos la cara lo mejor es hidratarla con una crema que penetre en nuestra piel y le de elasticidad y elimine esa tirantez que nos deja el agua del grifo. 

Igual que hidratamos la cara debemos hacer lo propio con los labios y las manos, pues son otras de las zonas que más sufren el frío. En el caso de los labios lo ideal es hacerse con un bálsamo y este sí, llevarlo todo el día en el bolso para ir aplicándolo cuando los notemos resecos, morderse las pieles y arrancarlas, aunque parece inevitable, NO es la solución. 

Para las pieles más secas que encima se encuentran deshidratadas se podría optar no solo por una hidratante, si no también por una nutritiva. 

No olvidéis tampoco que la mejor hidratación viene desde dentro, que hace más un consumo adecuado de agua que una crema sobre la piel, tened agua siempre a mano y bebed, esto no solo nos ayudará a tener una piel más radiante si no a también esquivar de forma más eficaz esta época de gripes y constipados. 




¡Saludos y mordiscos!

1 comentario:

  1. vale, después de leer esto... me voy a beber agua!!! jajaja

    muy buenos consejos.

    Por cierto, teneis un regalito en mi blog. ¡Espero que os guste!
    http://conlluviayconsol.blogspot.com.es/2013/12/vivan-los-premios.html

    ¡Un besito!

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