Buenas tardes a todas las bestias presentes.
Primero que todo, Dos Bellas Muy Bestias quiere disculparse públicamente por no haber actualizado demasiado estas últimas semanas. Ambas autoras estamos metidas en una crisis de imagen en este momento (entre otras muchas cosas), y nos cuesta que eso no se vuelque en nuestros escritos.
De todas maneras, ¡estamos trabajando en ello!
Hoy os traigo una nueva entrada de la sección What Is This, que por si no os suena, es nuestra sección dedicada a resolver todas vuestras dudas en cuanto a vocabulario o concepto en el mundo de la imagen. La de hoy va dedicada a un término que hoy se emplea mucho en las revistas de moda y seguro que os habréis encontrado sin tener demasiado claro qué engloba exactamente (porque a nosotras nos pasa): tomboy.
En primer lugar, si buscamos la definición de esta palabra en un diccionario inglés, encontramos lo siguiente:
n.
[countable]
an energetic girl whose behavior is considered typical of boys:As the tomboy of the neighborhood, she could outwrestle any of the boys her age.tom•-boy•ish, adj.
Es decir: "una chica llena de energía (rasgo que por convención social se asocia con los hombres) y cuyo comportamiento se considera masculino". En español, se traduce directamente como "marimacho", que seguro que os evoca la imagen mental de alguien que conocéis. Esa chica de clase que solía ir más con los chicos del grupo, tenía un carácter más fuerte quizás competitivo y no era amiga de faldas, zapatitos y vestidos (y si los vestía era por imposición materna).
Aplicado a la moda, como es obvio esta palabra se refiere únicamente a la vestimenta, sin entrar en absoluto en lo que a comportamiento se refiere. Y se utiliza para hablar de una manera de vestir en clave masculina, que hace un par de temporadas iba ligado al estilo militar, pero hoy en día podemos encontrar tanto en moda urbana como en atuendos propios de la más elegante de las fiestas.
Algunas piezas clave para alcanzar este estilo son: camisas, americanas y pantalones de traje de corte masculino, esmóquines, prendas rectas y sin pinzas, pantalones anchos o de corte boyfriend fit (el concepto es que podrían ser los vaqueros de tu novio, lo tengas o no), cazadoras beisboleras, camisas de cuadros, complementos de aire clásicamente masculino como relojes, gorras, maletines, sombreros, pajaritas y corbatas, zapatos masculinos como brogues o náuticos ...En general, todo lo que puedas llevar y que por sí mismo no grite a los cuatro vientos "soy una mujer". Hoy en día la moda es bastante ambigua y unisex en general, pero para coger el concepto es más fácil si nos remontamos atrás en el tiempo y pensamos en la moda masculina clásica, antes de los años 90.
Dependiendo de la usuaria, el estilo es más o menos exagerado y puede aparecer en forma de uno o dos detalles, una americana o un zapato, o marcar todo el atuendo por completo. Si no queremos que resulte demasiado masculino es importante poner el contrapunto femenino en un peinado y maquillaje que realcen nuestros rasgos. Unos zapatos de tacón que estilicen siempre ayuden, cuanto más finos mejor. Sin embargo también podemos optar por un look andrógino y mantener una imagen neutra, indefinida. Esto suele ser más fácil para aquellas mujeres que no tienen rasgos excesivamente femeninos a nivel facial o corporal.
Ejemplos de esta moda son por ejemplo la cantante Rihanna o la modelo Cara Delevingne que suelen tirar mucho de la clave tomboy en sus estilismos más desenfadados.
Esta temporada el estilo tomboy, o boyish ("de chico") está muy de moda, así que valor, señoras, y a atreverse a probarlo.
Mordisquitos para todos.
Ruth